Se mantiene al alza el precio de las propiedades en Miami Dade pese a la tendencia nacional
Se trata del segundo mes consecutivo en el que el principal condado del sur de la Florida ve precios récord para los bienes inmuebles
Con el aumento en las tasas de interés, comprar una vivienda en los Estados Unidos es más difícil. En el país, el 75% de los compradores saca una hipoteca para poder comprar una propiedad, y el hecho de que hoy la tasa de interés ronde el 6% (contra un 3% promedio el año pasado), desincentiva a muchos a comprar. Los precios en el país, como era esperable, empezaron a disminuir de manera sostenida.
Pero esta lógica no aplica al condado de Miami Dade, que sigue siendo el sitio más atractivo para el real estate en los Estados Unidos. Por segundo mes consecutivo, el valor de las propiedades en este condado batió récords.
Según una actualización del reporte de bienes raíces de la asociación de agentes inmobiliarios de la Florida, durante mayo de 2023 el precio promedio de una casa unifamiliar en Miami Dade fue de 620 mil dólares, superando los 600 mil dólares promedio del pasado mes de abril, y muy por encima de los 575 mil dólares que costaba en promedio una vivienda en mayo de 2022.
En el caso de los condominios, el valor se mantuvo más estable. En mayo de 2023 el precio promedio de un apartamento en Miami Dade fue de 415 mil dólares, lo mismo que valían un año atrás.
El tema sigue siendo la llegada de nuevos residentes que no cesa. Desde la pandemia, Miami Dade que siempre ha sido destino de inmigrantes sobre todo de orígen latinoamericano, se ha convertido en destino para estadounidenses que dejan ciudades donde los impuestos y la criminalidad son mucho más altos como Nueva York, San Francisco, Los Ángeles o Chicago.
Con la llegada de nuevos residentes que vienen muchas veces con sueldos más altos que los que se pagan en el sur de la Florida (pero con trabajos que mantienen desde sus estados de orígen por la posibilidad de trabajar de manera remota), la demanda sigue siendo muy alta. A eso se suma que ya son años los de alta demanda, por lo que el inventario empieza a escasear elevando aún más los precios.